NEUMONÍA-ALBA

 DEFINICIÓN:

La neumonía es una infección que inflama los sacos aéreos de uno o ambos pulmones. Los sacos alveolares de llenan de pus lo que provoca tos con flema o pus, fiebre, escalofríos y dificultad para respirar. Esto puede ser causado por un virus, bacterias y hongos.

AFECTACIÓN:

Los signos y síntomas son los siguientes:

• Dolor en el pecho al respirar o toser.

• Desorientación o cambios de percepción mental (en adultos de 65 años o más).
• Tos que puede producir flema.
• Fatiga.
• Fiebre, transpiración y escalofríos con temblor.
• Temperatura corporal más baja de lo normal (en adultos mayores de 65 años y personas con un sistema inmunitario débil).
• Náuseas, vómitos o diarrea.
• Dificultad para respirar.

MORTALIDAD:

La neumonía es una enfermedad muy prevalente. De manera global está aproximadamente entre el 5 y el 10%; la mortalidad hospitalaria, entre el 10 y el 15%; y la mortalidad de los pacientes que pasan por la UCI se sitúa entre el 20 y el 30%.

GRUPOS DE RIESGO:

• Adultos mayores de 65 años.
• Niños menores de 2 años con signos y síntomas.
• Personas con alguna afección de salud no diagnosticada o con el sistema inmunitario debilitado.
• Personas que reciben quimioterapia o toman medicamentos que inhiben el sistema inmunitario.

PREVENCIÓN:

• Vacunandose.
• Asegúrate de que los niños se vacunen. Los niños menores de 2 años y para niños de 2 a 5 años que son particularmente propensos a contraer la enfermedad neumocócica. Los médicos además recomiendan la vacuna contra la influenza para niños menores de 6 meses.
• Practicar una buena higiene. Lávate las manos regularmente o usa un desinfectante para las manos a base de alcohol.
• No fumar.
• Mantén fuerte tu sistema inmunitario.